Entre el éxtasis musical y el deseo puro
El ambiente se ilumina a saltos, el humo denso transforma el aire en niebla futurista, y justo ahÃ, bajo la bola disco, un tipo con traje galáctico gira alrededor de una criatura con orejitas rosas y brillo en los ojos. No es una alucinación ni una escena de una pelÃcula clase B de 1986: te adentraste en el corazón de una discoteca que desafÃ